Resumen: Desde hace cincuenta años, la organización del conocimiento —el desarrollo de conceptos científicos y su estructuración— se entiende como un problema lógico y, por tanto, universal. Los enfoques tradicionales ven las áreas del conocimiento como dadas naturalmente y regidas por un crecimiento orgánico. El constructivismo ha traido un cambio de paradigma, que contempla la organización del conocimiento como una convención social; y, consecuentemente, considera escépticamente la existencia de estándares universales. Simultáneamente, se ha producido en las ciencias un interés más intenso sus fundamentos históricos y sociológicos; y en la filosofía de la ciencia ha ganado en importancia la reconsideración de diferentes relativizaciones. En este artículo, se discuten vías de las posiciones sociológicas clásicas y se trazan sus implicaciones en la comprensión de la información y el conocimiento, así como para la ciencia de la organización del conocimiento, atendiendo especialmente a las objeciones que plantean a las perspectivas clásicas.